El Instituto de Investigaciones en Ciencias Económicas de la Universidad de Costa Rica (IICE-UCR) presentó el Estudio Trimestral de la Economía Costarricense para los primeros tres meses del 2025 y las proyecciones del siguiente periodo.
En el documento, advierte sobre los probables efectos que la imposición de aranceles a las exportaciones por parte del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, ocasionará en Costa Rica y, sobre todo, en el Régimen Especial de Zonas Francas.
El Financiero conversó con Daniela Córdoba, investigadora que formó parte de la elaboración del estudio, quien abordó las previsiones en torno al comportamiento de los mercados internacionales, las consecuencias en varios sectores productivos y la inflación nacional.
A continuación, un extracto de la conversación:
¿En qué sector Costa Rica percibirá los primeros efectos en las exportaciones a Estados Unidos?
En las zonas francas, donde se produce equipo de precisión, médico y electrónico, pues son los que aportan casi el 90% de las exportaciones y su crecimiento.
Sin embargo, aún es incierto porque no se sabe si, efectivamente, se van a aplicar los aranceles por el 10%, si será un porcentaje menor o si habrá excepciones.
¿En cuál sector existe un menor riesgo?
Aquellos con menor participación en las exportaciones, como los productos textiles, cuero, calzado, productos químicos y farmacéuticos, así como el sector pecuario, la pesca y los productos plásticos, que también representan una porción pequeña. Aunque todos se verán afectados.
Y en el caso de empresas pequeñas, el problema se agrava: por su tamaño, probablemente no tengan margen de maniobra para buscar nuevos mercados o renegociar sus condiciones de exportación.
¿Tienen una estimación de cuándo llegarían las consecuencias con mayor fuerza, en caso de hacerlo?
Lo que pensamos es que, de entrar a regir los aranceles, tendrían un efecto en la economía que se podría empezar a sentir hasta finales de este año.
Además, prevemos una baja al crecimiento con respecto a lo que teníamos pronosticado en enero. Si nos fijamos en el primer trimestre del año pasado y antepasado, siempre el que hacemos en ese periodo tiende a ser el más bajo.
¿Cuáles son los factores que podrían acelerar esa previsión a corto o mediano plazo?
Creo que la decisión dependería de los productos a los que se les apliquen los aranceles. Si estos recaen sobre bienes como equipo médico, instrumentos de precisión o microchips, entonces sí podríamos esperar un impacto más rápido.
Es probable que, desde el primer mes en que empiecen a aplicarse, ya se observen repercusiones importantes, al menos desde el punto de vista estadístico.
¿Qué tan peligrosa es la dependencia de Costa Rica al Régimen Especial en coyunturas económicas como la actual?
Si yo dependo exclusivamente de vender en una zona específica y pierdo el acceso, ¿qué pasa? Simplemente me quedo sin dónde vender. Tal vez ya tengo asignado un espacio en ese mercado, pero no en ningún otro.
Podría intentar buscar otros lugares donde vender, pero eso no garantiza que pueda colocar toda mi producción. Es muy probable que tenga pérdidas por haber dependido de un solo canal de venta.
Ese es solo un ejemplo, pero transmite la idea: si dependemos mucho de un sitio para comercializar productos y se ve afectado por factores externos que están fuera de nuestro control, entonces nos exponemos a pérdidas importantes.
¿Cómo afectarían esas pérdidas en términos de empleo a las zonas francas?
Tal vez en el corto plazo no se perciba una afectación inmediata. Sin embargo, en un plazo más largo, entre tres y seis meses, o incluso más, si las pérdidas en las exportaciones se mantienen, es muy probable que algunas empresas se vean obligadas a despedir personas o irse del país.
Además, el simple hecho de que exista la amenaza de imponer aranceles ya genera incertidumbre y puede desincentivar la Inversión Extranjera Directa (IED) en el país.
¿Qué acciones pueden tomar las empresas para prevenir ese escenario?
Desarrollar nuevas estrategias que les ayuden mantenerse en el país, o bien trasladarse a otros lugares donde los aranceles no las afecten.
No obstante, esto implicaría una reconfiguración costosa tanto en términos logísticos como financieros. Tal vez algunos aspectos logísticos, como el transporte de mercancías, puedan ajustarse en el corto plazo, pero restablecer una nueva operación o sucursal no es algo que se logre en tres meses.
¿Y las instituciones en Costa Rica? ¿Cómo pueden contribuir?
Va más allá de lo que plantea la teoría económica; entra en el terreno de la negociación política, porque las empresas que operan en zonas francas ya gozan de exenciones significativas. Entonces la pregunta clave es: ¿qué más se les puede ofrecer para que decidan quedarse en el país?
En algunos casos, lo que producen es solo un insumo dentro de una cadena más amplia; en otros, es un bien final. La cuestión es qué incentivos adicionales se pueden brindar, si es que hay alguno viable, para que estas empresas mantengan sus operaciones aquí.
También depende en gran medida del tipo de industria, del producto que fabrican y de cuál es su mercado destino.
¿Consideran que los aranceles de Trump serán una fuerza al alza o a la baja para la inflación?
Hay muchos supuestos sobre cómo podría comportarse la inflación, pero el principal mecanismo es el tipo de cambio.
Si sube, entonces muchos productos importados se encarecen. Por ejemplo, el arroz importado costaría más.
Lo mismo ocurriría con la compra de vehículos, que tiende a aumentar cuando el precio de la divisa está baja. La gasolina también subiría, y aunque no es el componente más importante, tiene un peso significativo dentro del Índice de Precios al Consumidor (IPC).
¿Los Tratados de Libre Comercio (TLC), a nivel general, podrían presentar tensiones?
Imponer aranceles de forma generalizada y unilateral a otros países afecta negativamente la percepción de las relaciones comerciales. Este tipo de medidas pone en duda la estabilidad y el respeto a los acuerdos previos, como los TLC.
Ya no existe la seguridad de que lo pactado se mantendrá en el tiempo, sino que todo puede cambiar repentinamente; genera desconfianza en el ámbito internacional y debilita la credibilidad de los compromisos comerciales entre países.